Tranquilo, si, pero desesperante. Era angustiante no ver tierra cerca, ni
siquiera el menor indicio de ella.
Por momentos pasaban troncos y tablas cerca, pero era tanto mi esfuerzo
por asirme a ellos que terminaba rompiendolos y terminaban flotando
alejándose de mi.
Al final desperté pensando, -gracias a Dios estoy en tierra firme-,
aunque en el fondo conservo el temor de que no sea solo un sueño.
siquiera el menor indicio de ella.
Por momentos pasaban troncos y tablas cerca, pero era tanto mi esfuerzo
por asirme a ellos que terminaba rompiendolos y terminaban flotando
alejándose de mi.
Al final desperté pensando, -gracias a Dios estoy en tierra firme-,
aunque en el fondo conservo el temor de que no sea solo un sueño.
Enviado desde mi iPod :D